Son muchas las personas tanto hombres como mujeres que utilizan pelucas en la actualidad, pero lo que no resulta tan fácil es ponerla para que no se note. Una persona que lleva peluca lo hace porque quiere tener un aspecto normal, porque por el motivo que sea no tiene pelo o no tiene pelo suficiente como para poder llevar su cabello al natural.
No importa el motivo que te haya hecho decidir utilizar una peluca en tu vida diaria, si lo haces es porque quieres hacerlo. Pero deberás tener algunos aspectos en cuenta para que puedas disfrutar de tu peluca y que además, no se note que lo es. Todos pensarán que es tu pelo natural y que estás fabulosa o fabuloso.
Lo primero, la calidad de la peluca
No es lo mismo comprar una peluca de 100 euros que una de 1000 euros o más. Sí, las pelucas no son baratas, pero si no quieres que se note que es una peluca sintética, entonces es necesario que inviertas algo de dinero en ella y que al menos se vea pelo real antes de que te la pongas. Lo ideal es que la peluca sea de pelo natural, porque al menos de esa manera será una peluca de calidad y realmente parecerá cabello natural cuando la tengas puesta, ¡porque estará fabricada con pelo real!
Si tienes una peluca que al verla se nota que no es pelo real, no importa cómo te la pongas, siempre se notará de un modo u otro que no lo es. Además las pelucas más baratas tienen sistemas de sujeción menos sofisticados por lo que podría hacer que se te moviera de la cabeza o incluso que se te cayera, ¡qué vergüenza!
Y es que no hay nada que dé más vergüenza que las personas que están a tu alrededor sepan que estás usando una peluca. Incluso si escoges una peluca cara y de buena calidad puede que lo noten si no la pones correctamente. Pero si sigues algunos pasos es probable que puedas lograr ponértela sin que se note que es una peluca.
Dale forma
Lo primero que tienes que pensar es en recortar la peluca y darle forma para que esté adecuada a tu rostro y a tu cuerpo. Las pelucas para que sean atractivas deben parecer lo más natural posible. Si no te ves capacitada para darle forma, entonces lo mejor que puedes hacer es ir a un peluquero para que le dé forma y que sepa cómo cortarla para que te quede bien.
Si no encuentras una peluquería que trabajen con pelucas, puedes pedir información sobre salones de belleza, estilistas u otras peluquerías donde sí trabajen con pelucas. Una peluca cuesta mucho dinero y es necesario que quien la trate sea todo un profesional y que sepa lo que está haciendo cuando la recorta.
Los polvos de talco son tus aliados
Si no tienes la economía como para comprarte una peluca con pelo natural y no te ha quedado más remedio que comprarla con pelo sintético -o quizá es que la prefieres así-, entonces los polvos de talco serán un buen aliado para ti.
Solo tendrás que espolvorear con cuidado los polvos de talco sobre la peluca y después sacudirla con un cepillo suave. Cuando acabes de hacer esto te darás cuenta que la peluca parecerá más natural que antes de haberlo hecho, ¡parece magia!
Usa gorros
Si es invierno o si te gusta usar gorros, sombreros o gorras son una buena opción cuando uses pelucas, sobre todo si es de pelo sintético o si la sujeción que tiene no es del todo adecuada. Si te pones un gorro la peluca se mantendrá en su sitio y no se notará que llevas peluca, será un buen disimulo.
Es necesario que para que parezca más real distribuyas el pelo debajo del sombrero, gorro o gorra para que no se vean bultos o cosas extrañas. Tiene que parecer que es totalmente natural.
Invierte en una buena sujeción
Es importante que para que la peluca se vea como pelo natural esté bien sujeta y además, en el sitio adecuado en tu cabeza. La forma en que sujetes la peluca en tu cabeza dependerá del tipo de peluca que hayas comprado y del sistema que tenga. Lo más habitual es que se sujeten con horquillas o con cintas adhesivas. Escoge el método que mejor va contigo y después, hazlo tuyo, pero que sea de buena calidad.
Mantén un buen cuidado de la peluca
Si quieres que la peluca se vea real, entonces deberás cuidarla muy bien y que además, la calidad te dure por mucho más tiempo. Cuando compres la peluca deberás saber cuáles son los cuidados que necesita en cada momento, así que pregunta al fabricante directamente cuáles son los productos necesarios o cómo debes cuidarla. Es importante también que sepas exactamente cómo debes lavarla para que no se estropee.
Y además de comprar una peluca de calidad o que se ajuste a tu presupuesto y de que sepas cómo ponerla y cómo cuidarla, tu actitud también es muy importante en cuanto al hecho de que no se note que llevas peluca. En este sentido, tu expresión corporal o incluso tu forma de comunicarte con los demás puede marcar la diferencia.
Si estás nervioso/a porque tienes peluca, no paras de tocarla una y otra vez o te obsesionas con tu aspecto, es más que probable que los demás empiecen a sospechar que el pelo que tienes no es real y que lo que llevas puesto es una peluca. Para que esto no ocurra, es importante que mantengas la naturalidad e intentes olvidar que llevas una peluca puesta.
Está claro que antes de salir de casa deberás colocarte la peluca adecuadamente y asegurarte de que no está mal puesta y que está bien sujeta. Pero una vez que tengas esto comprobado, entonces, olvida que tienes la peluca puesta y olvida también qué es lo que pueden estar pensando los demás. Eres tú quien debe sentirse bien contigo misma en todo momento. Después de esto, disfruta de tu peluca y de tu nueva imagen.