Un pelo es la batalla diaria de cientos de mujeres. Después del lavado diario el pelo siempre está brillante, pero a las pocas horas se desluce y parece que lleva varias días sin lavarse. Aunque no se puede eliminar por completo el problema, sí hay algunas claves que te ayudarán a mantener tu pelo limpio por más tiempo y con menor sensación de suciedad.
Comenzaremos por el lavado. Es totalmente falso que cuantas más veces se lava el pelo más se engrasa. Lo único cierto de ello, si es que se puede llamar así, es que cuando se frota el cuero cabelludo se activa la producción de grasa; por tanto, lógicamente, a más veces que se lave el pelo, más veces que se frota el cuero cabelludo.
Pero no nos desviemos del tema. A la hora de lavar el cabello un error que cometemos habitualmente es la temperatura del agua. Si nos lavamos el cuerpo con agua caliente, nunca podemos mantener esa temperatura para limpiar nuestro cabello. Usa agua tibia si no quieres estimular la producción de las glándulas sebáceas.
No laves el pelo con agua caliente
Además tienes que asegurarte que aclaras bien tu cabello, eliminando cualquier tipo de rastro de champú que pueda haber.
Después de lavarte el pelo, cepíllalo siempre desde la raíz hasta las puntas, nunca al revés, para evitar acumular grasa en el resto de la melena. Y cuando llegue el momento de usar el secador, no maltrates tu cabello con aire demasiado caliente ni situando la boquilla a menos de 15 centímetros del pelo.
Recomendaciones contra el pelo graso
Por último, cinco recomendaciones:
- Sécate el pelo con la cabeza hacia abajo.
- Evita en la medida de lo posible utilizar a diario gomina, laca o geles fijadores.
- No uses sombreros ni cintas demasiado ajustadas.
- No te toques más de lo necesario el pelo para evitar ensuciarlo.
- Intenta, en la medida de lo posible, llevar peinados que alejen el pelo de la cara, un foco de formación de grasa.