Aunque todavía queda muchísima gente a la que le echan para atrás todos esos remedios caseros o esas recetas para hacer mascarillas, exfoliantes, cremas o todo tipo de productos de cosmética, es cierto que poco a poco se están extendiendo muchísimo más porque las propiedades y beneficios que tienen son altísimos. El primero de ellos, por supuesto, es que gran parte de esos productos son mucho más económicos que los que puedes comprar en cualquier centro de estética, aunque también es cierto que cada vez son más low cost.
Los aceites son uno de esos remedios que se pueden utilizar para cuidar tu piel y tu cabello. El aceite de oliva es muy práctico para hidratar la piel, el aceite de argán para devolver la vida a tu cabello, o el aceite de jojoba para desmaquillar los ojos sensibles.
Junto a todos ellos también existe el aceite de coco, un aceite que se puede convertir en tu mejor aliado de belleza para dar vitalidad a tu cabello. Es más, además de poder aplicar directamente el cabello de coco, cada vez son más los productos capilares que incluyen entre sus ingredientes el aceite de coco.
Las grasas, las proteínas y las vitaminas y minerales que contiene (entre ellas potasio, fósforo, calcio, hierro o vitamina C y B) estimulan el crecimiento de tu pelo, aportándole un brillo extra y consiguiendo una hidratación máxima, algo imprescindible para que tu cabello esté perfectamente sano y lleno de vitalidad y soltura.
Los beneficios del aceite de coco
Además, si tu pelo es seco, el aceite de coco se puede convertir en una de las claves para solucionar el problema, consiguiendo que tu cabello vuelva a crecer fuerte y sano.
De la misma forma, aunque el aceite de coco es perfecto para cualquier cabello, también está especialmente indicado para personas que tienen problema de caspa. La caspa es un problema muy habitual en todo tipo de cabellos, y el aceite de coco también te ayuda a combatirlo y a evitar su reaparición.
Cómo aplicar el aceite de coco en tu cabello
Ahora bien, además de conocer los grandes beneficios que te aporta este aceite, también deberás saber cómo aplicar y con cuánta frecuencia para evitar que un gran aliado de belleza puede convertirse por una incorrecta aplicación en todo lo contrario.
- Coloca un par de cucharadas de aceite de coco virgen en tus manos con mucho cuidado de no derramarlo.
- Comienza a masajear tu cabello, extendiendo bien el aceite de coco por todo el pelo, desde la raíz hasta las puntas. Deberás extenderlo dando un pequeño masaje durante unos 15 minutos para que quede de forma uniforme por todo el cabello.
- Pasado ese tiempo tienes dos opciones en función de que en qué momento del día te vayas a aplicar el aceite de coco. Puedes o bien dejarlo que actúe durante aproximadamente una media hora o bien puedes enrollar tu pelo en una toalla a modo de turbante y dejar que el aceite de coco actúe durante toda la noche. Con esta segunda opción la eficacia será mucho mayor puesto que le das al aceite muchísimo más tiempo para actuar.
- Una vez que te quitas la toalla o que haya pasado la media hora, es momento de retirar los restos del aceite de coco con un buen chorro de agua tibia.
- Cuando hayas comprobado que efectivamente has retirado todo el aceite es momento de que te laves el pelo con tu champú habitual y lo seques como lo haces habitualmente, sin necesidad de nada extra.
¿Con qué frecuencia aplicar el aceite de coco?
Como todos los tratamientos de este tipo, es preciso hacerlos con la frecuencia adecuada para que, como decíamos, no se estropee. Como bien dice el refrán, 'lo poco gusta y lo mucho cansa', algo que hay que aplicarse en absolutamente todos los tratamientos de belleza.
Por norma general, y si tu cabello no tiene ningún tipo de problema añadido, o no necesita ningún tipo de tratamiento especial, puedes aplicarte el aceite de coco entre una y dos veces por semana. Eso sí, la primera vez que lo apliques, comprueba que no se te enrojece el cuero cabello, que tu pelo no está más graso de lo normal ni que, por el contrario, se te queda más seco de lo que suele estar. Una vez que has comprobado que todo son ventajas y que no tiene efectos secundarios para la salud de tu cabello, ya puedes empezar a hacerte este tratamiento con más frecuencia.