El moño es uno de los peinados de mayor éxito en verano porque es muy refrescante y cómodo. Es, además, el que siempre nos saca de cualquier apuro ya que resulta adecuado tanto para las grandes ocasiones como para llevarlo a diario. Y es que todo depende de cómo lo combinemos.
En este sentido, seguro que más de una vez has visto a las actrices y modelos o incluso a algunas chicas por la calle lucir moños muy grandes y abultados que dan la impresión de que guardan una melena espectacular. Nada más lejos de la realidad. Piensa en los sujetadores con relleno. ¿Sabías que los moños también pueden llevar "relleno"? Y lo mejor de todo, ¿sabías que ese relleno suele ser un calcetín?
Aunque esta pregunta te haya podido generar ciertas dudas e incluso incompresión y sorpresa, lo cierto es que todas podemos lucir un moño espectacular e impresionante independientemente del volumen de nuestra melena. Y lo que es mejor: es gratis, muy fácil de hacer y no hace falta salir de casa.
Lo primero: utensilios necesarios
Está claro que la clave de todo el peinado está en el calcetín o en los calcetines. Elige un par de calcetines que tengas más desgastados o que no suelas utilizar ya que habrá que cortarlos. En teoría, da igual el color o los dibujos que los calcetines puedan tener ya que la idea es que no se vea bajo ningún concepto. Pero, por si acaso, no estaría de más dar preferencia a los calcetines negros o de colores similares al de tu cabello.
Por último, también te harán falta un par de coleteros o gomas del pelo, orquillas y agujetas o pasadores. Aquí sí que es importante que al menos una de las dos gomas del pelo y las orquillas sean del mismo tono que tu cabello.
Ya tengo todo listo, ¿siguiente paso?
Si ya tenemos todos los utensilios preparados, el siguiente paso es muy sencillo pero es vital que lo hagamos bien porque es la base del peinado. Hay que cortar la punta de los dedos al calcetín o calcetines y, después, enrollarlos en sí mismos hasta hacer que parezcan una rosquilla.
Aquí ahora el secreto está en la siguiente idea: a mayor número de calcetines o mayor grosor de los mismos, más volumen y tamaño del moño. En términos generales, esto depende un poco de la cantidad de pelo que tengas y la longitud del mismo. No te preocupes: poco a poco, cuando hayas experimentado un poco sabrás cómo hacer que parezca más o menos grande. Para empezar, con un par de calcetines finos está bien.
Como apunte, es cierto que los míticos coleteros anchos que tienen más grosor también nos pueden servir y ahorrarnos el romper un par de calcetines. Por otro lado, los calcetines ofrecen más versatilidad y dan más juego a la hora de dar más o menos tamaño y forma al moño. Depende del gusto y la imaginación de cada una.
Cómo hacer el moño
Llegados a este punto, los pasos que quedan son muy fáciles y sencillos: cepíllate bien el pelo y hazte una coleta con una de las gomas de pelo. Después, introduce el calcetín a modo de coletero y ponlo a la altura de la goma del pelo. Ten las orquillas y las agujetas a mano ya que te harán falta.
El siguiente paso es algo más complicado. Consiste en coger el pelo y recubrir el calcetín con él precurando muy bien que no se vea. Puedes usar un coletero que sirva para fijar el pelo alrededor del calcetín (recuerda que sea del mismo color que tu pelo) o directamente optar por ajustar el pelo al moño con las agujetas. En cuanto al pelo restante, rodea con él el moño y sujétalo con orquillas. Puedes aplicar un poco de laca para que no se mueva demasiado.