La piña es muy útil para el cuidado facial La aparición de puntos negros es muy frecuente en todo tipo de pieles, especialmente en las que tienden a ser más grasas. En muchas ocasiones, hasta el simple hecho de tocarnos la cara con asiduidad puede generarlos, como consecuencia de un aumento de grasa y/o suciedad.
Desde Bekia Belleza te hemos contado cómo eliminar los puntos negros y cómo evitar su aparición. Como otra modalidad para la prevención y cuidado de la piel, te presentamos ahora un truco de belleza casero que ayuda a cerrar los poros y depurar las imperfecciones: la mascarilla de piña.
Aunque pueda resultar poco común, lo cierto es que la piña es una fruta que guarda muchas propiedades y que no suele generar ningún tipo de reacción alérgica. Entre sus propiedades, podemos destacar las antiinflamatorias, es buena para facilitar la circulacíon, mejor la digestión, ayuda a adelgazar y tiene propiedades depurativas. En algunos países se considera una excelente fruta afrodisiaca. También tiene muchos antioxidantes como la vitamina C, B1 y B6 y alto contenido de agua que hacen de ella un complemento eficaz para el cuidado de la piel.
Mascarilla de piña Mascarilla de piña y miel
Como su nombre indica, para esta mascarilla tan sólo necesitas mezclar zumo de piña y miel. En cuanto a las cantidades, una cucharada de miel y una y media de zumo de piña es suficiente siempre que se logre crear una mezcla homogénea de ambos.
El siguiente paso consiste en aplicar la mascarilla. Lávate y sécate la cara justo antes de fijar la mascarilla. Una vez que la hayas repartido de manera homogénea por todo el rostro, incidiendo en la zona donde más puntos negros tengas, dejála actuar durante 15 minutos.
Después, retírala con agua y asegúrate de haber retirado la mascarilla en su totalidad. Repite el proceso dos o tres veces por semana, y en pocos días podrás lucir un rostro libre de puntos negros.
Apuesta por las mascarillas caseras Mascarilla de manzanilla, yogur y piña
Algo más elaborada en cuanto a número de ingredientes, pero igual de fácil de hacer. Para realizar esta mascarilla sólo necesitarás: media taza de té de manzanilla, ramas de perejil, una rodaja de piña y media taza de yogur natural. Y es que el yogur es muy útil para los cuidados faciales: puede usarse tanto para hidratar como para evitar las manchas y el acné.
Primero, hay que licuar el té de manzanilla con las ramitas de perejil y la piña. Una vez que todo haya quedado hecho una mezcla homogénea, se añade el yogur. Cuando la mezcla esté formada, se repite el mismo proceso de antes: rostro lavado, se aplica y se retira a los 15 minutos.
A diferencia de la anterior, esta mascarilla es recomendable usarla a diario para empezar a notar sus efectos. Con ella, lograrás reducir la grasa y como consecuencia, eliminarás y también evitarás la aparición de los puntos negros.
