Los tratamientos de belleza son cada vez más codiciados. Aunque, en realidad, no se cuenta con todo el tiempo que nos gustaría. Una de las primeras cosas en borrarse de la lista de tareas pendientes diarias es una sesión de limpieza facial a fondo o ir a retocarse las cejas para devolverles la forma natural y necesaria a la hora de conseguir un rostro perfecto, radiante y descansado.
A pesar de que es una de las zonas a las que no solemos prestarle la atención necesaria, más allá de su depilación o de devolverles la forma correcta cada periodo de tiempo, lo cierto es que las cejas representan toda una ventaja en nuestro rostro. No solo protegen a los ojos del sudor y de otros agentes externos, evitando así que caigan dentro de ellos, sino que también suponen un aliciente estético puesto que dan mayor énfasis y protagonismo a la zona de la mirada.
Además, las cejas tienen una forma característica dependiendo de la cara, por lo que aportan personalidad y cuentan con un carácter expresivo adicional. Por lo tanto, estas deben estar siempre perfectas para que, tanto un maquillaje como el propio rostro sin productos cosméticos, sean el resultado de una cara descansada y bien cuidada.
Peligros de teñirse las cejas
Un tinte de cejas puede resultar toda una comodidad estética, ya que devuelve el color del pelo original mediante una coloración especial. Además algunos productos ayudan a mantenerlas fuertes y sanas, rellenan la zona de calvas que se forman de manera natural y revitalizan la mirada. Pero no todo es bueno, sino que existen ciertas desventajas que deberías tener en cuenta si quieres empezar a realizar un tratamiento de este tipo.
Teñirse las cejas en un centro de belleza
- En el caso de los centros especializados, los riesgos son mínimos. Pero sí que nos encontramos con algunas barreras que pueden ser un problema para ti. Sobre todo en el caso del tiempo, ya que tienes que pedir una cita previa y esperar a tener el periodo disponible para que te lo hagan. Eso sin contar con los imprevistos de última hora que puedan surgir.
- Más allá de eso, el precio puede resultar otro pequeño inconveniente, dependiendo de tu bolsillo y del lugar en el que quieras hacértelo. Eso sí, acudiendo a estos centros te aseguras una prevención de riesgos mucho mayor que si te lo practicaras en casa, ya que los materiales, la experiencia y la atención que te dedican ellos son mucho más recomendables. Y por la que vale la pena pagar.
Teñirse las cejas en casa
- Aun así, cada vez son más las personas, tanto hombres como mujeres, que se preocupan por su aspecto físico, por lo que tienden a buscar consejos y productos caseros o fáciles de conseguir con los que poder realizarse su propia sesión de belleza en casa. Así se ahorra tiempo de espera, dinero y el tener que desplazarse a un centro de estética especializada. Un ejemplo de ello es el tinte para cejas que se comercializa y se utiliza de manera autónoma.
- El problema de teñirse sin una supervisión profesional, sobre todo si es de las primeras veces que se realiza y no se tiene mucha idea en el tema por muchos vídeos de consejos que se hayan estudiado a fondo, es que pueden no resultar como uno quiere. Ya no solo por la calidad del producto, que nunca será igual que la que pueda llegar a tener la marca con la que trabaja un especialista, sino también no hacerlo correctamente.
- La forma de los ojos es muy importante, por lo que el tinte de cejas debe aplicarse de manera adecuada a cada uno. En principio, es solo rellenando los huecos, aunque no todos los productos tienen la misma textura ni requieren de la misma cantidad, por lo que podemos pasarnos de coloración o quedarnos cortos.
- Además, cabe la posibilidad de que el color escogido no termine de adaptarse a nuestro rostro, ya sea porque no es el nuestro o porque queda demasiado llamativo en contraste con la raíz de nuestro pelo original. Así como la forma, que quedará más bien espesa, es decir, que puede que se note la calidad del producto utilizado, ya que el tinte de cejas no se aplica pelo por pelo, sino que puede aparentar como una mancha o se puede notar el trazo de una línea muy gruesa. Por lo que puede quedar de todo menos natural.
- Finalmente, una de las desventajas o peligros a tener más en cuenta es la calidad del producto. Al teñirse, pasa igual que con el pelo, ya que estos pueden hacer que se pierda la dureza del vello y parte de la intensidad del color. Todo depende del tipo de componentes con los que cuente cada tinte de cejas que vayamos a escoger.
- Por otro lado, también tiene una parte muy importante el hecho que entronca la salud. En este punto, los productos químicos, e incluso muchos de los naturales también, son los que causan efectos secundarios. No solo porque se pueda terminar por caer parte del pelo por el uso indebido y muy continuado del tinte para cejas, sino también por las reacciones alérgicas que puede causar.
Otras formas de teñirse las cejas
En cambio, existen tratamientos cien por cien eficaces y que garantizan un buen cuidado estético de las cejas. Estos son practicados en los centros estéticos especializados, donde los profesionales adaptan cada uno de los pasos a las necesidades de cada persona.
Tanto para la forma de las cejas, como para el color, el tipo de relleno que se busca y el cuidado de la piel, un centro de belleza puede terminar por ser la elección más eficaz. En estos casos en los que puedes adaptarse a diferentes tratamientos, te aseguran un trato especializado y personal, además de una garantía de eficacia y responsabilidad, en el que te ayudan a mejorar la calidad de tu aspecto estético en la medida que quieras, sin arriesgarte a posibles efectos secundarios adversos que sí que encontrarás con el tinte de cejas caseros.