Si realizamos esas cinco comidas recomendadas, tampoco tendremos tanta hambre a la hora de la comida y evitaremos esos temidos empachos. Por eso también es importante el desayuno. Si desayunamos poco, seguramente lleguemos a la hora de la comida con más hambre.
Es muy importante que si sentimos la necesidad de picar entre horas escojamos alimentos sanos como puede ser la fruta, y sobre todo que nos sacien. Los dulces y la bollería que a la que a veces no nos resistimos entre comida y comida aumentan el nivel de apetito debido a su alto contenido en azúcares.
¿Qué alimentos reducen la sensación de hambre?
La fruta es el alimento perfecto para saciarnos sin engordar. Gracias a su alto contenido en agua llena el estómago sin aportarnos demasiadas calorías. La fruta se debe tomar entre horas, así que es la mejor opción para llevar al trabajo o a clase en sustitución de otros alimentos que sí que pueden engordarnos.
Podemos preparar zumos con las frutas que más nos guste o incluso macedonias que se pueden convertir en la merienda perfecta.
Las verduras también contienen un alto porcentaje de agua, además de nutrientes y numerosas vitaminas. El clásico caldo de verduras suele ser recomendado en muchas dietas, ahora que llega el frío puede ser un buen alimento con el que saciarnos de forma sana. Por otro lado, para los meses de calor, la opción perfecta pueden ser las sopas frías como el gazpacho, ya que su nivel calórico también es bajo.
Los alimentos ricos en fibra aunque es cierto que aportan más calorías, sacian más. Es el caso del pan. Comer un poco de pan en las comidas no es malo, pero será mejor si lo sustituimos por un pan integral, ya que,como hemos dicho, aunque el aporte calórico seguramente sea muy parecido, la fibra conseguirá saciarnos antes, por lo que al final terminaremos comiendo menos pan.