Desodorantes naturales: cosmética casera

Sudar es un acto reflejo de nuestro organismo en respuesta a un ejercicio físico o a una estimulación. Es algo que sucede con normalidad, pero por ello no quiere decir que sea de nuestro agrado, ya que el sudor presenta un olor muy característico, diferente en cada persona. Toda la piel de nuestro cuerpo tiene glándulas sudoríparas, orificios por donde sale el sudor, pero la zona de la axila es donde se concentra el olor que más nos preocupa.

Por esta razón fue creado el desodorante, un producto que nos ayuda a controlar la cantidad de sudor que segrega nuestra axila y además reducir o eliminar el mal olor. La fórmula del desodorante ha ido evolucionando con el tiempo y este producto ya se considera una rama de la cosmética y actualmente es muy estudiada. Sin embargo se han ido añadiendo productos químicos que son perjudiciales para la salud y el medio ambiente, lo que ha llevado a recurrir a la preparación de desodorantes caseros.

Los desodorantes naturales o desodorantes caseros tienen la ventaja de que eliminas la presencia de productos químicos que no tienen ningún efecto contra el sudor, pero sí un efecto perjudicial en el medio ambiente, porque la industria cosmética es una de las más contaminantes. Además resultan más económicos porque están hechos con productos naturales que podemos encontrar en el supermercado.

A veces, el uso de desodorante no es suficiente y por eso existen los llamados antitranspirantes, que cierran los poros evitando que la axila segregue sudor. Pero esto no es sano, porque aunque no sea agradable, el cuerpo necesita transpirar a través de las glándulas. Por eso la mejor opción es recurrir a los desodorantes naturales, donde hay además una amplia variedad que puedes escoger en función de tus necesidades.

Desodorantes naturales más utilizados

Piedra de alumbre : es el desodorante natural por excelencia. Es de origen volcánico y desde hace siglos se han aprovechado de sus propiedades cicatrizantes y bactericidas, además de ser un buen combatiente contra el mal olor en axilas y pies. Otra de sus ventajas es que es muy duradero.

Bicarbonato sódico : No deja de ser un compuesto químico pero no es perjudicial para nuestra salud. Es uno de los desodorantes naturales más utilizado. Se aplica directamente sobre la piel de la axila y se puede combinar con unas gotas de aceites esenciales. Es un buen neutralizador del mal olor. La única desventaja es que puede dejar manchas blancas en la ropa oscura, por lo que habrá que aplicarlo en pequeñas cantidades.

Aloe vera: de la planta del aloe vera se extrae el jugo, que se utiliza no solo para preparar desodorantes caseros sino también contra quemaduras y hongos. Este compuesto es muy utilizado en la industria cosmética porque tiene muchas propiedades beneficiosas para la piel.

Té verde : de sobra son conocidas las propiedades que tiene el té verde, pero es que además se puede utilizar para preparar desodorantes caseros. Se prepara fácilmente mezclando una pequeña cantidad de té con gotas de varios aceites esenciales y alcohol especial para pieles sensibles. Lo que hace que sea un buen desodorante es su propiedad astringente.

El jugo de rábano o romero también es utilizado en la formulación de desodorantes naturales. No son tan comunes pero presentan las mismas características. Antes de decantarse por un desodorante u otro habrá que hacer pruebas y su efecto dependerá del tipo y cantidad de sudoración que segreguen nuestras axilas.

Desventajas de los desodorantes caseros

Como no somos expertos en cosmética, nos llevará tiempo encontrar las cantidades y la fórmula correcta para obtener el desodorante deseado.

Esto puede acarrear problemas en nuestra piel, produciendo un efecto contraproducente.

Las mujeres somos las que más experimentamos en estos casos y según algunas investigaciones, se ha llegado a pensar que una de las causas por las que somos propensas al cáncer de mama es el uso de desodorantes incorrectos. Esto es debido a que cuando el cuerpo no puede segregar las toxinas, éstas se acumulan en el organismo y pueden afectar a órganos próximos, como por ejemplo las glándulas mamarias.

Si lo tuyo no es la cocina y no quieres arriesgarte, apuesta por desodorantes ya comercializados que contengan compuestos poco perjudiciales y que respeten el medio ambiente. Sobretodo huye de los antitranspirantes, opta por un desodorante bien perfumado que, aunque no evite que sudes, si evitará el molesto olor a sudado.