Lilly Collins, natural apostando todo a los brillos

Hay muchas veces que la regla de 'menos es más' es mejor seguir a pies juntillas para no fallar y no ser tachada como una de los peores beauty looks de la semana. Por eso Lilly Collins fue a lo seguro y decidió ceder todo el protagonismo a un vestido largo en tono rojo y rosado y lucir un maquillaje en tonos discretos para no sobrecargar demasiado. Y hay que reconocerle que fue la mejor idea que pudo tener. La sombra en un color anaranjado destaca principalmente por unos pequeños destellos producidos por nos toques de purpurina. El colorete aporta vida al rostro y se complemente a a la perfección con el labial que en este caso es un pequeño toque de gloss que aportan brillo y una pizca de color a un maquillaje de los mas discreto. El vestido asimétrico con un hombro al descubierto es perfecto para lucir un peinado de lado como ha hecho la actriz. Un efecto mojado -otro de las tendencias del momento en peinado- con la raya al medio, el flequillo detrás de las orejas y todo apartado a un lado hace que sin duda este beauty look sea todo un acierto y se merezca una nota más que salientable.