El segundo beauty look de Kim Kardashian inspirando en su musa, Cher

Kim Kardashian hizo historia con su primer look para la MET Gala 2019 apareciendo sobre la alfombra rosa con un vestido de silicona y un beauty look que parecía recién salida de la playa de Malibú. Un vestido, por cierto, que fue creado por Terry Muglier tras 20 años retirado. Pero tras la gran fiesta llega la gran post fiesta y, aunque parezca mentira, tiene casi tanta importancia como la propia MET Gala. Y si de impactar se trata, Kim Kardashian no tiene rival. Del wet efect pasó a una peluca azul con lo que parecen unas mechas californianas grises hechas exclusivamente de pedrería. Y que mejor para combinar con este nada discreto complemento y un vestido de látex que dejaba muy poco a la imaginación también en tono azul que acompañó de un maquillaje discreto pero bien acertado. Efectivamente, todo en tonos nude con purpurina en tonos plata y azul (y algún pigmento rosa) de forma casual en los párpados. Nada más necesitó Kim Kardashian para conseguir un look que podría ser considerado de ninfa de los mares, mamá pitufa o artista de variedades. Sea como fuere, estaba clara su inspiración: un look que años -bastantes años- atrás había lucido la propia Cher durante una de sus actuaciones. Da igual cuando, porque Cher es un icono atemporal.