El negro será uno de los protagonistas de este look por eso debemos contrastarlo con un rostro luminoso. Para conseguirlo, antes de aplicarte la base, utiliza un serum o una crema hidratante que te aporte luminosidad. En el caso de que cuentes con un iliminador en crema, aplícalo sobre la zona 'T' del rostro con ayuda de los dedos.
La luminosidad es importante
En cuanto a la base de maquillaje también puedes optar por una que sea iluminadora, pero sin duda lo más importante, es que escojas un fondo de maquillaje que se adapte a la perfección al tono de tu piel. A continuación esconde las posibles imperfecciones y ojeras con un corrector. Al igual que la base aplícalo sólo donde sea necesario. Nunca debemos abusar.
A continuación tienes varias opciones. Para los ojos, puedes optar por utilizar simplemente un delineador. Aplícalo sobre el párpado superior y difumínalo mientras lo alargas hacia el exterior del ojo de forma que sobresalga un pequeño 'rabillo'.
Por el contrario, si prefieres algo más atrevido, decántate por unos ojos ahumados. Con un lápiz de ojos negro rellena todo el párpado móvil y posteriormente difumínalo. No incidas demasiado sobre la zona del lagrimal. Para darle más intensidad al ojo, aplica a continuación una sombra negra y de nuevo difumínala con cuidado hacia la parte exterior del ojo.
Delinea la parte superior del ojo alargándolo por fuera, así como la línea de agua y la parte inferior de las pestañas difuminándola también con ayuda de un pequeño pincel. Termina el maquillaje de ojos con unas pestañas marcadas al máximo.
En cuanto a los labios, puedes optar o bien por un color rosado casi nude para dar todo el protagonismo a tus ojos, o bien decantarte por un labial llamativo en un intenso rojo o granate.
Termina con un peinado rompedor apostando por una melena desenfadada y desestructurada al estilo Kristen Stewart.