No solo por la calidad general que irradia esta casa estadounidense, sino porque gracias a sus detalles logrará proclamarse como una verdadera tendencia. Culpa de ello la tiene, principalmente, el nuevo cepillo abanico con elastómero que Maybelline NY ha querido incluir en este reciente producto. Un elemento pionero que ofrece efectos hasta ahora desconocidos y aporta al cepillo una sensorialidad única.
Fluidez e intensificación de la mirada
Aspecto en el que sus seis tamaños diferentes de cerdas pasan a tener el papel principal de la campaña. Una característica que permite añadir fluidez a nuestra mirada y que consigue desplegar todas y cada una de las pestañas sin apelmazarlas. Además, la parte cóncava del cepillo permite adaptarse a la forma del ojo gracias a sus cerdas cortas, lo que hace que su aplicación sea mucho menos costosa.
Por su parte, las cerdas largas y espaciadas de la parte convexa conceden la posibilidad de extender las pestañas a 180º y abrir la mirada. Pequeñas notas esenciales que ofrecen a las mujeres un uso de la máscara más sencillo e intuitivo. Asimismo, el rastro de los agentes humectante, los polímeros y los ácidos grasos deja a su paso un resultado a la vez fino y ligero, cubriendo delicadamente las pestañas para una cobertura intensa y definida. En definitiva, un englomerada que aporta mucha sofisticación, elegancia y volumen a nuestros ojos.