Cuando alguien escucha maquillaje permanente lo primero en lo que piensa nuestro cerebro es en tener que ir todo el día con la cara pintada, con una base de maquillaje que sea más fuerte que el yeso y que aguante durante todo un día contra viento y marea, algo a su vez que, a veces, se nos antoja imposible. Sin embargo, el maquillaje permanente no es ir con nuestro rostro impecable todo el día, si no que hace referencia a una nueva técnica estética, la micropigmentación.
La micropigmentación es una especialidad cuyo fin es embellecer, corregir o mejorar determinados rasgos del rostro de la persona. Es una práctica muy recurrente por los buenos resultados que da, ya que otorga un aspecto natural, pero maquillado y muy duradero. El tratamiento consiste en la micro implantación de pigmento vegetal en las diferentes zonas del rostro que se necesiten, o en las que se quiera implantar, como por ejemplo, las cejas, la comisura de los labios, la línea de los párpados, cicatrices o las ojeras.
La micropigmetación no es dolorosa
La micropigmetación es un tratamiento completamente indoloro que consiste en esta implantación del pigmento necesario a través de una aguja muy fina en la epidermis que genera ese efecto de maquillaje permanente al mismo tiempo que elimina algunas imperfecciones del rostro, como las rojeces o las cicatrices. Uno de los usos más extendidos de la micropigmentación es en las cejas, para personas que hayan perdido su pelo en la zona o para aquellas que lo noten despoblado. La micropigmentación en las cejas otorga resultados hiperrealistas y al ser un tratamiento duradero puede desaparecer como una de las preocupaciones de cualquier persona que no se encontrara cómoda con el aspecto de las suyas.
Aunque el tratamiento no conlleva ningún dolor a las personas que se lo realizan, sí otorga una breve molestia (al fin y al cabo está entrando una aguja a una de las capas de la piel). Las zonas del rostro sobre las que se ha llevado a cabo el tratamiento suelen mostrar una pequeña hinchazón que será visible entre 3 y 7 días después de la intervención. Además, la pigmentación parecerá también más oscura que de lo que será en el resultado final en estos primeros días después del tratamiento.
Pese a que al mismo nombre del tratamiento se le conoce también como maquillaje permanente, no es excluyente para poder aplicarse maquillaje encima. Aunque el tratamiento elimina las imperfecciones del rostro y le otorga una sensación de maquillaje natural, se puede colocar el maquillaje que cada persona quiera por encima. Sin embargo, sí habrá que esperar a que la hinchazón de los primeros días remita y nuestra piel se restablezca, entonces podrás maquillar tu rostro con los productos que desees aunque la micropigmentación ya habrá cubierto muchas de tus necesidades en cuanto al color y la base sobre el rostro.
La micropigmetación es irreversible
Ligeros cortes en la piel
La inserción del color se realiza durante unos ligeros cortes en la piel a través de una aguja muy fina, aunque la micropigmentación dista mucho de un tatuaje, ya que se realiza sobre capas mucho más superiores, por lo tanto, no es posible revertir su resultado de manera inmediata. El pigmento se elimina con el sudor, el contacto con el agua, el lagrimeo, el uso de gafas, la piel grasa y muchos otros factores, pero siempre en un periodo largo de tiempo, por lo que si te arrepientes de tu micropigmentación solo tendrás que esperar a que el pigmento vaya desapareciendo paulatinamente de manera natural, nunca de manera inmediata.
La pigmentación disminuirá en un 40%
Las primeras reacciones ante la micropigmentación son de miedo debido al intenso color que adquiere nuestro rostro justo después de la intervención, sin embargo, hay que tener en cuenta que el color de la pigmentación disminuirá en un 40% en el resultado final, por lo que no hay que asustarse en un primer momento ya que la intensidad del color de los retoques casi bajará hasta la mitad. Es recomendable, después de la primera intervención, hacerse un retoque a los tres meses para evitar que el color final disminuya de intensidad y para corregir alguna variación que se haya podido dar de color en la zona tratada.
Duración de la micropigmentación
La duración de la micropigmentación depende de diferentes variables. En primer lugar, depende del lugar en el que te realices la micropigmentación, por ejemplo, no es lo mismo la micropigmentación en los labios que sufren más el roce, con la comida, con las bebidas o con las mismas manos que la micropigmentación en las cejas.
En general, la micropigmentación, independientemente de la zona, debería al menos durar 12 meses, con tal vez uno o dos retoques durante este tiempo. La exposición al sol o la rutina del cuidado de la piel también son factores que pueden alterar la duración de esta practica, por ejemplo, el uso recurrente del exfoliante es uno de los motivos por los que la micropigmentación se desvanecerá con mayor rapidez.