No cabe duda de que a la hora de pasear por la alfombra roja, Anna Faris es de las que con el makeup quiere dar todo el protagonismo a la mirada. La actriz siempre elige looks que realcen sus intensos ojos azules, optando por crear un contraste que los convierta en el centro de atención. Hacemos un repaso por todos sus trucos a la hora de maquillarse para ver cómo consigue hacerse no solo con su look de ojos pero también cómo completa el maquillaje para que quede perfectamente equilibrado.
Una de las cosas a tener en cuenta a la hora de analizar el maquillaje de Anna Faris es que la actriz suele llevar flequillo, ya sea abierto, de lado o recto. Esto hará que el marco para la mirada ya quede en gran parte determinado por la forma que cree con el cabello sin embargo sus cejas cumplen también una función muy importante.
En muchos casos en los que el look se complementa de un flequillo se tiende a descuidar el aspecto de las cejas ya que no suelen verse, sin embargo no es este el caso de Anna Faris, que suele escoger flequillos más cortos o despeinados que dejan ver sus cejas. Para complementar este peinado y ayudar a enmarcar su mirada y dar estructura al rostro, la actriz prefiere unas cejas finas y muy arqueadas, llegando incluso a veces a esconderse la parte más alta de la ceja bajo el flequillo. Para que la ceja no pierda visibilidad por ser fina, Faris las suele maquillar del mismo color de sus raíces para que no se vean despobladas.
Como decíamos, el foco de su maquillaje suelen ser los ojos, y es que tras haber creado el marco perfecto gracias al flequillo y a las cejas, el maquillaje de ojos toma todavía más relevancia. Faris, que tiene unos llamativos ojos azules oscuros les da todavía más protagonismo gracias al look ahumado.
De esta manera la actriz maquilla con sombras negras y grises su párpado móvil, difuminando la sombra hacia fuera y rasgando ligeramente el ojo. Para aportar todavía más profundidad al ojo, la actriz maquilla las líneas de agua de negro, combinando con el color negro del anillo alrededor del iris consiguiendo así crear ese contraste. Para completar el look de ojos y alargar más la mirada Anna Faris suele utilizar pestañas postizas que tengan la parte externa más larga, enfatizando así ese efecto de ojos felinos.
Una vez completado el look de ojos es el momento de maquillar el rostro y para ello Anna Faris pone la prioridad en crear un lienzo impoluto y unificado. Para lograrlo las bases de cobertura media o alta, como las que ella utiliza, son las idóneas ya que consiguen este resultado fácilmente. Unificando el tono de la piel se consigue que el look de ojos resalte todavía más y no deje un aspecto despreocupado.
Además de asegurarse de que la base de maquillaje tenga la suficiente cobertura, la actriz también se fija en el acabado, escogiendo siempre aquellas que dejen un resultado mate y ligeramente aterciopelado con un ligerísimo toque de luminosidad que ayuda a aportar un pequeño toque de luz al rostro.
A pesar de que las bases de alta cobertura tengan su lado positivo ya que cubren perfectamente el rostro y unifican el tono fácilmente, también tienen una parte negativa y es que suelen dejar un aspecto muy artificial en la piel ya que lo cubren completamente dejando un efecto enmascarado y sin vida.
Para recobrar esos tonos naturales de la piel, Anna Faris confía en el colorete, focalizando así el color en una sola zona del rostro. La actriz suele escoger coloretes claros que no carguen demasiado el look y que no compitan con el intenso ahumado de ojos. Entre sus tonos preferidos destacan los rosados y los anaranjados, que aplica sobre las manzanas de sus mejillas.
Siguiendo la misma idea de no aplicar un colorete demasiado llamativo para no cargar el look, Anna Faris escoge así también su labial, centrándose en elegir aquellos colores que no añadan más colorido e intensidad al rostro. Para ello escoge aquellos labiales que sean del mismo color que sus propios labios y que al aplicarlos ayuden a aportar definición y un toque de cremosidad e hidratación. Destacan entre sus favoritos los rosados con un subtono amarronado y los colores corales con un toque rosado que combinan a su vez con el colorete.