Hablar de Billie Eilish y de su look es hablar de un look de contrastes y es que la joven cantante es siempre una de las más sorprendentes sobre la alfombra roja. Su estilo consiste en una yuxtaposición de elementos que consiguen crear un look que solo Billie Eilish podría llevar. Desde sus outifts oversized complementados con una infinidad de complementos a esas larguísimas uñas o su cabello en el que, al contrario de lo que estamos acostumbrados, son sus raíces las que sí van teñidas. Y en contraposición con todo este exceso nos encontramos ante un maquillaje sencillo y natural, un maquillaje que está más cerca de ser inexistente que de sumar un elemento más a su look. Analizamos sus trucos de maquillaje para ver cómo consigue hacerse con este look tan natural.
Una de las peculiaridades del estilo de Billie Eilish es que a pesar de llevar looks muy sobrecargados para el maquillaje siempre ha optado por un look lo más minimalista posible que realce sus facciones sin que apenas se aprecie la presencia de maquillaje. Es por eso que todo el maquillaje que suele aplicar es fiel al color de cada parte del rostro en la que lo aplique. En sus looks de maquillaje por lo tanto nunca encontraremos (de momento) sombras de colores, coloretes demasiado coloridos o labiales extravagantes.
Rigiéndose por esta norma, no sorprende que sus cejas tengan la apariencia tan natural que tienen. Las cejas de Billie Eilish son de lo más natural posible y es que a pesar de ir depiladas para realzar la forma de estas las mantiene bastante gruesas y las peina hacia arriba para conseguir un aspecto despeinado. Para realzar este aspecto 'bushy', las maquilla sutilmente con sombras marrones para así hacerlas ver más oscuras y más pobladas.
No cabe duda de que los ojos de Billie Eilish son de lo más llamativos y es que tienen un color azul cristalino que le aportan al rostro una intensa mirada penetrante. A la cantante le gusta jugar con ese aspecto de su rostro y realzar esa mirada perdida. Para ello no tiene que utilizar mucho maquillaje ya que sus ojos hacen la mayor parte sin embargo utiliza dos trucos sutiles que consiguen enfatizar ese efecto.
El primero de sus trucos es utilizar máscara de pestañas. Billie Eilish riza sus pestañas para conseguir que estas estén peinadas hacia arriba y a continuación aplica máscara de pestañas tanto en las pestañas superiores como en las inferiores. De esta manera consigue abrir el ojo y que sus ojos azules se vean completamente, sin pestañas de por medio. El segundo truco que utiliza es para enfatizar esa mirada penetrante y perdida. Para conseguirlo aplica un ligerísimo toque de sombra de ojos negra a lo largo de la línea inferior de pestañas para crear un efecto de ojos caídos. Gracias a que utiliza muy poca cantidad de sombra consigue crear un efecto sutil que parece de su propio ojo.
Como no podía ser de otra manera, para el maquillaje de la piel volvemos a encontrarnos ante un maquillaje tan natural y fresco que crea el efecto de 'cara lavada'. Para conseguir este 'no makeup-makeup' en la piel Billie Eilish opta por bases de maquillaje de una bajísima cobertura, lo suficiente como para darle al rostro una sutil capa unificadora.
Las bases de maquillaje que la cantante suele utilizar son aquellas que tengan una pigmentación baja y un acabado ligeramente hidratado que le aportan al rostro un brillo natural. Sin embargo Billie Eilish no es demasiado estricta con que su piel esté perfectamente unificada ya que las ojeras más oscuras aportan a su look pasota y le suman protagonismo a los ojos.
Dado que su piel no suele estar demasiado cubierta con maquillaje la necesidad de otros productos para reavivar el rostro no son del todo necesarios, ya que sus colores naturales se pueden ver todavía a través de la base.
Sin embargo a la cantante sí le gusta aportar un ligero toque de colorete en las manzanas de sus mejillas que le aportan a la cara un rubor juvenil. Dado que Billie Eilish opta siempre por lo natural el contouring o un bronceado intenso están fuera de su diccionario.
Como decíamos, Billie Eilish nunca utiliza productos en el rostro que aporten un color que no tenga ya de por sí. De la misma manera que para las cejas utiliza tonos marrones, maquilla sus ojos solo con máscara de pestañas y el rubor que aplica en las mejillas es del mismo color que su rubor natural, para los labios apuesta por un sencillo gloss de labios que aporta brillo e hidrata pero sin sumar ningún color a sus ya coloridos looks.