El gloss nació hace cinco años como un complemento para aportar brillo a la boca. Unos labios sedosos y jugosos listos para besar. Este producto cosmético da una sensación de volumen a la vez que aporta un brillo extra a los labios.
Y es que desde su aparición, son muchas las celebrities que han apostado por este producto. Con un simple toque tus labios resaltarán como una auténtica estrella, pero si además previamente te das una capa de pintalabios y luego 'gloss', el resultado será óptimo. De esta manera aportarás color a tus labios y un brillo natural a la vez.
Gloss vs. Barra de labios
El primer brillo labial que se comercializó fue 'X-Rated' de Max Factor, en 1932. La fórmula original se vendió hasta 2003 cuando la firma Procter and Gamble retiró el producto. Al igual que el lápiz labial, su formato puede distribuirse en varios formatos: pequeñas botellas cilíndricas con un aplicador redondeado en la punta, con una punta en forma de pequeño pincel o un tubo pequeño para realizar la aplicación utilizando la punta de la yema de los dedos. Bonne Bell introdujo al mercado el primer brillo labial con sabores en 1973.
Actualmente la variedad de 'gloss' es infinita, así como las marcas que lo comercializan. Hay desde el neutro hasta los brillantes, que son los más demandados por las jóvenes. No obstante, el brillopueden resultar más pegajoso, frente a la barra de labios que hidrata más. Bekia Belleza te propone aplicar la barra de labios y después gloss para fijarlo.
El gloss aporta brillo
Para conseguir mayor fijación y naturalidad, diez minutos después de aplicarlo pasa un pañuelo de papel por los labios presionando suavemente, ya que el 'gloss' dura mucho menos. Asimismo, evita que el color se desplace, para ello pinta el entorno de los labios con un tono natural o bien del mismo color que utilices para rellenar los labios.
En verano, los tonos nude, como el beige, marfil y los tostados resaltarán tu bronceado y los intensos, como el rojo, el coral o el naranja, darán una mayor luminosidad a tu piel. Escoge los tonos más claritos para el día y atrévete con los más fuertes para la noche.