Una esencia que llegaba al mundo 30 años atrás y que, poco a poco, ha ido encontrando su lugar entre los tesoros más preciados del mercado: 'Aire Loewe'. Hasta tal punto que su presencia se ha hecho más que necesaria para muchas mujeres. Por ello, compartiendo relevancia con las renovaciones que le preceden, la serenidad y la paz han conseguido apoderarse de todos y cada uno de los sentidos de esta casa española para dar vida a un nuevo miembro de su familia aromática: ' Atardecer '.
'Atardecer', un viaje hacia la ensoñación
Y es que, sumergidos en un escenario donde la caída del sol logra trasladarnos a un viaje interior exento de problemas, el regreso de la delicadeza y la ensoñación vuelve a atrapar a esta última reliquia olfativa. Aunque no solo formará parte de las emociones que suscita, sino que su propia envoltura también quedará encerrada en una atmósfera de color dorado y amelocotonado.
Una imagen que sigue conservando las curvas y las formas de su diseño original y que logra sumar años con la distinción aromática y también de color de su impecable elixir. Con todo ello, es imposible que el manjar que encierra este ovalado envase llegue a decepcionar a sus adeptas. Una amalgama que abre con notas de flor de naranjo, fruta de la pasión y bergamota y que termina por alcanzar un corazón impregnado de Ylang Ylang y jazmín Sambac. El descanso llegará con sus notas de salida, bañadas en matices de sándalo, vanilla y almizcle.