Cada persona tiene una dentadura con unas características concretas, así como un color de esmalte totalmente diferente, algo en lo que mucho tiene que ver el nivel de ácido de la saliva. Por ello no todos podemos presumir de sonrisa reluciente con unos blanquísimos dientes, sobre todo los fumadores, cuyos dientes tienden a volverse amarillentos con mucha más facilidad.
Muchos alimentos te pueden aportar muchas vitaminas que, además de mantener sano y fuerte a tu organismo, también conseguirás blanquear un poco tus dientes porque, como el resto del cuerpo, necesitan 'alimentarse' para estar fuertes.
Pero además de lo importante que es la alimentación, también existen algunos trucos caseros muy sencillos de llevar a cabo y que te permitirán darles a tus dientes un aspecto mucho más blanco. Todo ello, sin olvidar, por supuesto, que una correcta higiene con cepillado, hilo dental y enjuage bucal con fundamentales.
5 trucos para blanquear tus dientes
- Bicarbonato : al igual que es muy bueno hacer gárgaras con una mezcla de agua y bicarbonato, este ingrediente también te puede ayudar a blanquear tus dientes. Puedes añadir un poco de bicarbonato a tu pasta de dientes habitual o simplemente lavarte los dientes con la mezcla que puedes utilizar para enjuagarte la boca y, posteriormente, lavarte con tu pasta de dientes habitual.
- Limón : para aclarar tu esmalte también puedes cepillarte los dientes con una mezcla de zumo de medio limón y un poco de agua tibia o directamente frotar contra ellos la parte interna de la cáscara (método este último para el que también puedes emplear una naranja). Un método que quizá te da algo de escrúpulo por el limón pero que, como podrás comprobar, no será nada de eso, y además te dará un buen resultado.
- Sal : otra opción es fabricar una pasta de dientes con un poco de sal fina (que actúa como abrasivo) con unas gotitas de limón (muy útil como quitamanchas). Solo tienes que utilizar el resultado para cepillarte la dentadura incidiendo sobre aquellas piezas que están 'más feas'. Eso sí, esta pasta de dientes casera no la puedes usar a diario, como muchos puedes emplear el truco casero una vez a la semana o, si el resultado no es lo esperado, dos.
- Fresas : coge dos fresas y aplástalas con un tenedor hasta formar una pasta con la que frotarás tus dientes. Tras el proceso de cepillado te quedarán restos que podrás retirar o con un enjuague bucal o con hijo dental, porque si inmediatamente después te lavas los dientes con tu pasta habitual será como si no hubieras hecho nada. También puedes utilizar esta pasta y aplicártela por las noches, a modo de 'mascarilla dental', y por las mañanas lavarte la boca a conciencia.
- Aloe vera : el aloe vera tiene unas grandísimas propiedades tanto para cuidarte por dentro como por fuera. Y aunque te suene tremendamente raro, lo cierto es que el aloe vera también te puede ayudar para blanquear tus dientes. Puede que este truco te suene rarísimo, pero es muy efectivo. Deberás coger una cucharadita de aloe vera en gel y masticarlo durante unos minutos, extendiéndolo por toda la boca, sin preocupación puesto que, si tragas un poco, no va a pasar absolutamente nada, el aloe vera no es malo para tu organismo.
Aclara el color de tu dentadura sin grandes inversiones económicas
Lógicamente, estos consejos y remedios caseros, milagrosos no son. Todo tratamiento requiere un tiempo para que se empiecen a ver los resultados, ya sean remedios naturales o no.
En este caso, en cuanto a este tipo de remedios, en la primera ocasión que se practique habrá que hacer una 'prueba-error'. Si utilizas alguno de estos trucos lo mejor es que lo pruebes un día que no tengas previsto salir de casa en unas horas al menos por si te da algún tipo de reacción el ingrediente, principalmente en las encías. No es lo mismo comer algo, que frotarlo por la dentadura o enjuagarse con ello.
Una vez que hayas comprobado que todo marcha de forma correcta, puedes aplicarte algunos de estos trucos un par de veces o tres a la semana, consiguiendo poco a poco devolverles a tus dientes esa blancura perdida. Eso sí, debes tener presente que nada hace maravillas y que si tu esmalte no es blanco puro, estos remedios no te harán demasiado efecto.
Para cambiar por completo el 'color' de tus dientes, deberás acudir a una clínica dental en la que te pueden explicar en qué consiste un tratamiento de blanqueamiento dental, qué resultados puedes obtener, qué proceso conlleva y qué inversión económica te supondrá.